sábado, 28 de junio de 2014

Desprotegidas: sólo prosperan el 60% de las órdenes de alejamiento por violencia machista


"Tuve que sentarme a su lado. Sólo nos separaba un biombo. Yo no paraba de temblar". Ana recuerda con angustia el día en el que tuvo que enfrentarse en un juicio a su agresor, que es también su exmarido. No le permitieron declarar en una sala separada y tampoco a su hijo menor de edad, que, finalmente, por el pánico que le produce ver a su padre, no acudió a la vista.
Después de más de un año de espera y terror, Ana vio cómo su expareja era absuelta. Según el juez, no había suficientes pruebas contra él. Desde ese mismo día se le retiró la orden de protección que impedía que se acercara a ella, a sus hijos, a sus colegios y a su propio centro de trabajo.

El "ciclo de la violencia" en los casos de #violenciamachista


El ciclo de violencia” es un modelo muy conocido que nos ayuda a entender y explicar la situación de malos tratos que viven muchas mujeres en nuestra sociedad, tiene sus limitaciones, como por ejemplo, no siempre se dan las tres fases sino que se producen saltos, en algunos casos, no se manifiesta la luna de miel.

El movimiento cíclico de la violencia se transforma en una espiral descendente en la cual la mujer queda atrapada haciendo difícil que acabe con la relación de pareja. Cada vez que se repite el maltrato, aumenta la intensidad. La víctima sufre una desprogramación de su sistema cognitivo desvirtualizando la realidad en la que vive.